Capítulo 54
Leo se despertó de un sueño reparador por todos los ruidos molestos que retumbaban a su alrededor.
—¿Kng?
Subconscientemente levantó la cabeza y se quejó de dolor cuando su cabeza choco con algo. Se dió cuenta de que actualmente estaba atrapado en una pequeña jaula y siendo trasladado a algún lugar.
—¿Qué? ¿Ya está despierto?
—Date prisa. Mierda, tiene que aparecer un intruso justamente hoy entre todos los días. No es un buen día.
La jaula estaba cubierta con una gruesa tela para que no pudiera ver nada afuera. Leo inclinó la cabeza perplejo, él recordaba que estaba jugando en casa, así que no podía entender por qué ahora estaba de repente en este lugar.
Las orejas y la nariz de Leo se erizaron al mismo tiempo. La alarma que llenaba el pasillo era lo suficientemente fuerte como para lastimar sus sensibles oídos, pero al mismo tiempo, olía muy delicioso a su alrededor. Definitivamente era el olor a hígado fresco.
La baba se filtró de la boca de Leo, pero sacudió la cabeza con fuerza y se cubrió la nariz con ambas manos. Le prometió a Aracne que no causaría problemas de ninguna manera. Entonces tuvo que soportar... Pero pronto, las manos de Leo cayeron de su nariz y comenzó a babear nuevamente, había estado demasiado hambriento últimamente, y ahora tenía una comida bien servida frente a sus ojos.
Su resistencia no era lo suficientemente fuerte como para soportar una tentación tan intensa.
—(¡Aullido!)
Al final, Leo se sintió abrumado. Su cuerpo comenzó a hincharse rápidamente en la jaula.
*¡Craack! ¡Chasquido! ¡Tañido!
—¡U-Uwa!
—¡¿Qué?!
La jaula quedó destrozada en un instante y se abrió de golpe en todas las direcciones. Los hombres que movían la jaula cayeron al suelo y retrocedieron arrastrándose.
—¡Awoo!
Una bestia enorme apareció antes de que nadie lo supiera y rugió donde estaba, su cuerpo llenando el pasillo.
—¡Ahh!
La bestia de pelaje marrón balanceó su pata y aplastó a un hombre que se desplomó en el suelo. Sus pupilas doradas verticales brillaban con un frío intenso y los afilados colmillos que sobresalían de su boca emitían un brillo aterrador.
—¡Comida!
Leo finalmente perdió toda razón, se convirtió en una bestia feroz y comenzó a barrer por el pasillo.
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Lakis simplemente derribó a la gente que vigilaba la puerta y entró al mercado de esclavos.
*¡Clangclangclangclang!
Tan pronto como entró, sonó una alarma fuerte y las puertas alrededor del edificio comenzaron a cerrarse automáticamente con pesadas puertas de acero. Era un medio para atrapar al intruso y eliminarlo, pero en realidad funcionó a favor de Lakis. Con esto, sería capaz de borrar todas las plagas dentro sin que nadie escapara.
—¡¿Quién eres?! ¡Identifíca- ¡Gah!
Despiadadamente mató a todos los que vinieron en busca del intruso. La sangre que manaba de su mano atravesó a los enemigos frente a él, dejando una imagen secundaria de una delgada línea roja.
Lakis solo vino a buscar a Yuri de todos modos, no le importaba salvar a nadie más. Utilizó su poder de obediencia en algunos de ellos y se enteró de que el mutante estaba encerrado en la parte más profunda del edificio.
En cuanto al cuervo, Odin, a quien conoció antes en la casa de Yuri, Lakis lo mantuvo en la esquina de un almacén vacío que había encontrado mientras deambulaba por el Este. Si esto fuera en cualquier otro momento, haría que el cuervo abriera la boca con todos los medios necesarios, pero ahora, encontrar a Yuri fue lo primero.
<<Lakis, hay mucho ruido adelante, desde allá.>>
Luego notó abruptamente que, como decía el insecto, podía escuchar el sonido de cosas rompiéndose y personas gritando no muy lejos. Al principio, simplemente lo ignoró, pero desafortunadamente, venía de la dirección en que se dirigía Lakis.
—¡Argh!
—¡Grrrr!
Y pronto, Lakis encontró un monstruo que estaba causando estragos en los pasillos.
—¿Qué mierda es esa cosa?
La cara de Lakis se arrugó, pero actualmente llevaba una máscara por si acaso, por lo que su expresión no se reveló en el exterior.
El monstruo estaba repitiendo un comportamiento bastante inusual. Atraería a la gente frente a ella con su gran pata y las olía. Con algunos se lamía la baba que le caía del ocico y les demovara algún órgano, mientras que a otros les frunció el ceño y con sus garras los mataba, pero no sé los comía sino que los enterraba en un agujero que él mismo cavaba.
<<Espera, este olor...>>
Los ojos de Lakis se agudizaron repentinamente cuando percibió un olor familiar. El olor del monstruo arrasando frente a él era similar al olor a bestia que sintió en la ropa de Yuri.
—¿Knng?
En ese momento, Leo también olía a Lakis. La nueva persona que apareció olía a la más deliciosa de todo lo que había comido.
—¡GGGRRRR!— Desaparecida la razón, Leo babeó y corrió.
Los ojos de Lakis se llenaron de ridículo cuando vio que se atrevía a verlo como una presa y luego se movió.
—Mierda ¿A quién cree que este hijo de puta infectado con rabia está babeando?
*¡Explosión!
El monstruo era diez veces más grande que Lakis, pero agarró la cola de Leo y fácilmente arrojó su enorme cuerpo.
—¡Kkaeng!
La pared en la que Leo se estrelló se derrumbó y cayó. Él no podía entender por qué no logró atrapar a su presa y miró a aquel tipo con desconcierto, luego comenzó a babear de nuevo y se puso de pie.
Lakis miró a Leo y ordenó con frialdad.
—Mantén tu cabeza en el piso.
Una vez que la voz de poder extraño se extendió como una ola, los ojos de Leo se posaron en el suelo.
—¡Kyii!— Leo gritó, confundido por la negativa de su cuerpo a moverse como deseaba.
Entonces, de repente, otro olor proveniente de Lakis pasó por su nariz.
—...El olor de Yuri...
Recuperó sus sentidos por un momento y olisqueó mientras murmuraba para sí mismo.
Al escuchar eso, Lakis levantó una ceja.
Como pensó, el olor que estaba recibiendo de esta bestia era el mismo olor del que Yuri estaba cubierta la última vez. En verdad, quería cortar esta cosa en pedazos en el momento en que corría hacia él babeando, pero es por esto es que no lo hizo.
—Oye, hijo de puta. ¿La Yuri de la que estás hablando, es una mujer con cabello negro y ojos rojos?
—¡Yuri!
Los ojos de Leo brillaron jadeando y agitando la cola de un lado a otro como si estuviera feliz de escuchar el nombre de su amiga. Luego arrugó la nariz y levantó un poco la cabeza antes de volver a olfatear.
—... ¿El olor de dos Yuri?
Lakis entrecerró los ojos.
<<"El olor de dos Yuri" ¿Eso significaba que este monstruo sabía dónde estaba Yuri en este momento?>>
Lakis comprendió rápidamente la situación y ordenó a Leo.
—Perro ¿De dónde viene ese olor?
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—… ¿Qué pasó?
Por otro lado, el hombre que se había metido primero en el anillo de esclavos sospechaba de la repentina situación.
—¿Se dieron cuenta?
Su subordinado detrás de él también se tensó ante la repentina situación. El hombre aumentó sus sentidos y examinó su entorno. Sin embargo, los pasos apresurados solo se alejaban; no se acercaban a donde estaban parados.
—No. Creo que hay otro intruso.
—¿Deberíamos movernos entonces?— Su inteligente subordinado preguntó de inmediato.
El hombre asintió en la cabeza.
—No duele si llaman la atención allí. Nos moveremos según lo planeado.
—Sí, Lord Crawford.
El líder del grupo de búsqueda, Kalian Crawford, avanzó con valentía. La búsqueda con él se movió rápidamente para encontrar a las personas desaparecidas. Según el conocimiento público, solo los niños del orfanato habían desaparecido, pero también había niños nobles entre la lista de personas desaparecidas.
Si solo fueron los niños del orfanato los que estuvieron involucrados en este incidente, no había forma de que los superiores hubieran enviado a Kalian personalmente.
Honestamente, Kalian no estaba contento con esa idea, pero ahora no era el momento para que su mente divagara, por lo que centró su atención en el rescate de las personas secuestradas.
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*¡Golpe!
—¡Kyaa!
—¡M-Mamá!
—¡Wuaaaaa!
Mientras corría para encontrar a Leo, me topé con un grupo de personas que se apresuraban a ir a alguna parte. A juzgar por los grilletes en sus muñecas y tobillos, probablemente eran personas que fueron vendidas como esclavas.
—¡¿Q-Quién eres?!
La persona que parecía ser su supervisor gritó cuando nos vieron a mí y a Siren. Simplemente lo ignoré, salté junto a ellos con una patada y seguí mi camino.
—¿Solo nos vamos a ir?
—¿Qué más?
—No, pensé que los ayudarías, así que estoy sorprendida.
Siren murmuró como si fuera inesperado, pero era algo natural. Las personas que fueron atrapadas fueron un poco lamentables, pero no es como si tuviera sentimientos heroicos en mí y mi propósito aquí era solo llevarme a Leo.
*¡EXPLOSIÓN!
Pero en ese mismo momento, una gran explosión estalló frente a mis ojos. Un rato después, apareció un hombre en medio del polvo revoloteante.
Lo primero que noté en la vista llena de polvo fue un uniforme familiar y una vez que revisé la cara del hombre, no pude evitar detenerme.
—¿Qué? ¿Alguien que conozcas?— Preguntó Siren cuando notó mi pequeña reacción.
Si seguimos la definición literal de alguien que conoces, entonces si era alguien que conocía. Como era Kalian Crawford, el mismo tipo que vi ayer.
—Tu eres…
Una vez que se dio cuenta de mí y de Siren, el hombre frunció el ceño.
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