Capítulo 79
Damon caminaba molesto sin prestar mucha atención a los alrededores, pero en el momento en que giro la cabeza y sus ojos se cruzaron con los de Yuri, sus hombros se encogieron y dejó de caminar.
—¿Y-Yuri de la cafetería?
La cara que estaba cubierta de molestia hace solo unos segundos ahora estaba llena de perplejidad.
Damon estaba más agitado de lo necesario y sus ojos estaban temblando.
—¿Po-p-... ¿Por qué estás aquí?
Verlo tartamudear tan mal hizo que Yuri inclinara la cabeza.
<<¿Porque otra razón estaría en el mercado si no fuera para comprar?>>
Obviamente, no iba a hablarle así a un noble.
—Hola. Supongo que nos volveremos a ver.
Al escuchar su saludo, Damon se sacudió una vez más. La gente detrás de él se sorprendió de su comportamiento inusual y lo miraban con los ojos bien abiertos, pasando sus miradas de él a la señorita sin entender que estaba pasando.
Solo entonces Damon se dio cuenta de los ojos que lo observaban y manejó su expresión mientras reafirmaba su mirada. Luego se volvió rápidamente hacia las personas que lo seguían y ladró bruscamente.
—¿Qué están mirando? Hemos terminado aquí ¡Pueden desaparecer ahora!
Como el final aterrador de su oración, las cuatro o cinco personas detrás de él comenzaron a retirarse rápidamente.
—Ehem. Ha sido un tiempo.
Después de eso, Damon se acercó a Yuri. Pero por alguna razón, no podía mirarla directamente a la cara y habló con su mirada en otra parte. Sus mejillas también estaban lijeramente sonrojadas.
—Hace unos días... no era mi intención, pero te debo una.
<<¿Hace unos días?... ¿Estaba hablando del día en que fue atacado por un pájaro?>>
Yuri pensó que Damon podría estar evitando sus ojos hoy porque estaba avergonzado por ese incidente.
—No, esta bien. No tienes que deberme nada.
Damon no lo sabía, pero la razón por la cual el pájaro de Siren lo atacó fue por Yuri. Así que al final el incidente sucedió a causa de ella, pero, por supuesto, no tenía la intención de decirle eso y revolver un nido de avispas.
—¿Estás de compras hoy?
—Solo tengo algunas cosas que quiero conseguir.
Ante eso, Damon se aclaró la garganta sin razón y volvió su mirada hacia la pelinegra.
—En realidad... este edificio pertenece a la familia Salvatore.
Ella no sabía eso, así que interiormente estaba un poco sorprendida.
<<¿Pero por qué me dice esto? ¿Acaso está tratando de presumir?......>>
Ella pensó que él ya se había rendido de tratar de cortejarla después de que resolvieron su malentendido la última vez. Sin embargo, cuando miró a Damon, cuyas mejillas aún seguían estaban sonrojadas y parecía avergonzado de mirarla a la cara, no sintió que tuviera intenciones impuras cuando dijo eso.
Podría ser solo ella, pero curiosamente, sentía que Damon parecía un poco tímido hoy.
Esta apariencia era un gran contraste con lo que Yuri había visto en la cafetería hasta ahora o incluso en la casa de subastas, por lo que la hizo sospechar.
—Entonces, si miras a tu alrededor y encuentras lo que quieras, puedes decirles mi nombre y tomarlo.
Ante estás palabras sus sospechas solo seguían intensificándose.
—¿Por qué?
—Quiero decir... me salvaste del pájaro loco la última vez... y además de eso, también fui grosero contigo antes. Entonces-
*¡EXPLOSIÓN!
—¡¡Kyaaa!!
—¡¡Aaaahhhh!!
Una enorme explosión llegó a los oídos de ambos y los gritos surgieron dentro y fuera del edificio de personas sorprendidas por la repentina perturbación.
—¿Qué esta pasando?— Damon también estaba sorprendido, pero no entro en pánico.
Siguiendo el ruido del desastre, ambos fueron a la terraza más cercana para revisar afuera y vieron una nube de polvo saliendo del edificio de al lado.
Cuando miraron hacia abajo, vieron pedazos de una pared rota, fragmentos de vidrios rotos y la calle era una escena de caos con personas que se habían derrumbado en el piso.
—¡¿Q-qué demonios es esto?!— Damon gritó en estado de shock al ver esto.
*¡Explosión!
En ese momento, otro fuerte ruido estalló como si les arrancara los tímpanos. Esta vez, la conmoción se transmitió desde algún lugar más cercano. La explosión vino del edificio en el que estaban Yuri y Damon.
Cuando se deslizó hacia un lado, una luz intensa brilló en los ojos de Yuri. Rápidamente llevó a Damon con los ojos muy abiertos al borde de la terraza.
*¡Choque!
En poco tiempo, un viento tormentoso se extendió y el techo se derrumbó.
**************************************
—¿No es bonito esto también?
Kalian miró las joyas que tenía delante y parpadeó con indiferencia.
—¡Este tipo de gema roja también le queda bien a Selena!
Actualmente se encontraba en una tienda de alta gama ubicada en la calle principal. No sabía qué viento soplaba de repente, pero su abuelo, Bastian, abruptamente declaró que saldría. Y así fue como Kalian, que estaba en la mansión, terminó siguiendo a su abuelo como una especie de escolta.
—¿Cuál de estos dos les parece mejor chicos?
Bastian le tendió dos joyas que parecían iguales a los ojos de Kalian y pidió una opción. Después de una breve mirada hacia ellos, Kalian dijo:
—Ambos se ven bien.
—¿Correcto? Entonces ¿debería conseguirlos a los dos?
El dueño de la tienda a su lado se unió a la conversación con una enorme sonrisa.
—Oh, tiene buen ojo. Ese viene con un juego de aretes y pulsera, ¿Le gustaría que también se los muestre?
—Ohh, sí. Déjame ver.
Sin embargo, la otra persona que los acompaña aplastó la emoción de Bastian y el dueño de la tienda.
—Para mí... creo que ambos son bonitos, pero no creo que sean del gusto de la Srta. Yuri.
—¿N-no lo son? ¿Ambos?
—Si.
La que respondió firmemente a Bastian a pesar de la torpe mirada en su rostro no era otra que Anne-Marie. Ella había estado actuando como la cuidadora del abuelo de Kalian por un tiempo.
Cuando él vio que Bastian, que inicialmente había estado en desacuerdo con Anne-Marie, repentinamente cambió de opinión y comenzó a tratarla bastante bien, pensó que la previsión de Genos era tan notable como se esperaba. La razón por la que Anne-Marie hoy acompañaba a Bastian en su excursión, es porque él mismo insistió tercamente en que lo hiciera.
Y así, cuando escuchó el nombre que salía de la boca de la cuidadora, Kalian hizo una pausa.
—¿Estás hablando de la Srta. Yuri de la cafetería?
—¿Hm? ¿También conoces a esa niña?
—Sí, salí para una inspección y la conocí. Pero aparte de eso, ¿por qué el abuelo le está comparando un regalo?
—Fui a la clínica a ver a Anne-Marie y también la conocí.
Bastian miró a Kalian con evidente insatisfacción en sus ojos. En su mirada se quejaba porque su nieto no le había contado antes sobre Yuri, quien se parecía a Selena.
Kalian estaba perplejo al recibir esa mirada de Bastian, pero aún así, con Anne-Marie justo al lado de ellos, el anciano no criticaría a su nieto allí mismo.
<<Solo espera a que lleguemos a la mansión.>>
Kalian tembló ligeramente al notar los pensamientos de su abuelo.
—Ehem. Fui a la cafetería la última vez y dejé algo atrás, pero afortunadamente, esa niña lo trajo hasta la mansión para mí. Así que voy a devolverle el favor.
Es por eso que incluso trajo a la amiga de Yuri, Anne-Marie, hasta aquí. Quería recibir su consejo cuando estaba eligiendo un regalo como ahora.
—Entonces, ¿qué tal este?
Bastian dejó caer el objeto. Anne-Marie sacudió la cabeza y comenzó a buscar otra cosa.
Kalian observó en silencio la rara vitalidad en el rostro de Bastian.
Como era de esperar, la existencia de Yuri y su parecido con Selena parecían brindar un consuelo considerable de su abuelo. Al principio, Kalian también consideró obtener la ayuda de Yuri para tratar la angustia de Bastian. Sin embargo, le preocupaba que, por otro lado, ver a Yuri pudiera profundizar el deseo de su abuelo por su difunta hija y empeorar su mente.
Así que había estado dudando, pero al ver a Bastian tan emocionado por primera vez en mucho tiempo, se preguntó si sus preocupaciones eran infundadas.
—¿Qué tal si vamos a ver otra tienda?
Luego, finalmente, Anne-Marie bajó la voz para que el dueño de la tienda no pudiera escucharla y sugirió cuidadosamente esto a Bastian.
—¿Por qué? ¿Las cosas aquí son malas?
—No. Todos se ven geniales. Pero, um...
Ante la pregunta ella vaciló y arrastró el final de su oración. Su rostro tenía una sonrisa que era una mezcla de incomodidad y dificultad.
—Se siente un poco demasiado anticuado aquí...
—¿Qué?... Para resumir, esto es para los gustos de las personas mayores, ¿no es así?
Bastian se quejó, pero al final siguió la sugerencia de Anne-Marie y se levantó.
—¿Ya se va?
—Vendré de nuevo.
El dueño de la tienda ansiosamente trató de contener a Bastian, pero su mente ya se había ido. Quizás porque hoy el anciano había caminado más de lo normal, sus pasos temblaron un poco incómodos mientras avanzaba con su bastón. Kalian y Anne-Marie lo apoyaron a su lado.
—¡Agh, puedo caminar solo!— Pero Bastian se sacudió a los dos.
Al final, salió de la tienda solo, usando el bastón como apoyo. A pesar de que había una silla de ruedas hecha a medida para él, Bastian persistió en usar su bastón. Insistió en que no era necesario que usara una silla de ruedas cuando sus dos piernas aún estaban intactas. Y, caminando a paso lento, él tomó la delantera en la caminata.
Cuando salieron de la tienda, los asistentes que esperaban afuera los siguieron en silencio.
Anne-Marie parecía un poco incómoda; ella no podía adaptarse a este tipo de cosas en absoluto, así que queriendo disipar la incomodidad, ella intento crear una conversación.
—... El clima de hoy es agradable.
—Ciertamen-
*¡EXPLOSIÓN!
En ese mismo momento, un ruido atronador sacudió todo el distrito comercial, perforando sus tímpanos y una gran explosión estalló frente a él.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario