61. Te equivocaste de casa, villano

Capítulo 61

Siren revisó la cara de Yuri para ver si estaba molesta por lo que dijo. Por supuesto, ella no pensó en nada de eso, pero Siren estaba inquieta cuando vio su inexpresivo rostro. Luego cerró los ojos y agarró la cosa en la mano de Yuri.

—Mm... ¡No lo necesito! ¡Pero como quieres dármelo tanto, haré una excepción y lo aceptaré esta vez!

Como siempre, Siren no podía ser honesta consigo misma.

—Aparte de eso, Odin no ha venido, ¿verdad?

La pregunta de Yuri le recordó a Siren lo que olvidó.

—¡Oh, cierto! ¡Lo estaba buscando porque tengo algo que preguntar! ¿Cuándo vendrá el Cuervo?

—No puedo contactarlo, así que no lo sé.

Los ojos de Siren se abrieron un poco. Para Odin no contactar a Aracne... de alguna manera, no parecía algo que pudieras tomar a la ligera.

Siren le preguntó cuidadosamente a Yuri:

—¿Debo enviar un pájaro a buscarlo?

Ante eso, Yuri la miró con nuevos ojos.

—Oh, claro. También tienes ese tipo de habilidad.

—¡¿En serio acabas de recordarlo?!

—¿Me harías el favor?

El mal genio de Siren se encendió, pero ante las siguientes palabras de Yuri, su ferocidad se derritió.

La idea de que Aracne le pidiera un favor hizo que sus labios se curvaran de emoción.

—¡Ehem, mmm! Ya que me lo pides así, no se puede evitar. Tendré que usar algo de fuerza.

Mientras que por dentro, estaba eufórica.

<<¡Ahora no tengo que tener miedo de mirar dentro de la casa de Aracne!>>

Por supuesto, su alegría fue solo momentánea porque las siguientes palabras de Yuri la cerraron.

—Eso no significa que puedas mirar dentro de mi casa.

—¡!... ¡No lo haré! ¡¿Crees que estoy interesada en ti?!

La conciencia de Siren volvió a pincharse. Con sus expectativas frustradas, estaba un poco malhumorada y jugueteaba con sus alas. Por el aspecto de las cosas, tendría que retroceder de preguntándole a Yuri porque Lakis Avalon estaba en su casa.

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EL DÍA SIGUIENTE

Un carro deslumbrante se detuvo frente a la cafetería en Blue Ferret. La gente se sorprendió por la aparición de un lujoso carruaje adornado con joyas de lentejuelas doradas.

*Charlas. Susurros.

Un rato después, bajó un hombre guapo bien vestido. Echó un vistazo alrededor y luego frunció el ceño como si algo no le gustara.

—Todo el barrio es de mala calidad.

Entonces, finalmente, los ojos oscuros del hombre cayeron sobre el edificio de la cafetería frente a él.

<<Hmm, ¿entonces este es el lugar de encuentro de Kalian Crawford y Genos Sheldon?>>

La razón por la que Damon Salvatore dejó la Torre Alchemist y salió a la calle de la gente común, fue por el informe que recibió recientemente.

Dijo que últimamente, Kalian Crawford se detuvo en este lugar en un grado anormal. Por supuesto, la persona que proporcionó la información dijo que Kalian no parecía encontrarse con el hombre que se parecía a Genos Sheldon. También agregaron que, en su opinión, Kalian podría estar involucrado en una investigación encubierta.

Fue un buen razonamiento.

Pero las tripas de Damon le dijeron que había algo muy importante en esta cafetería. Para descubrir qué era eso, Damon entró en el edificio frente a él.

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Entró en la tienda de plebeyos por primera vez en su vida y, como era de esperar, estaba lleno del olor a té barato.

Gilbert había estado observando desde que el carruaje de Damon se detuvo frente a la tienda, por lo que inmediatamente corrió a saludar al cliente.

—¿Q-Qué le gustaría ordenar, señor?

—Cualquier cosa, trae la opción menos patética.

Era una orden mucho más difícil que el del noble noble Kalian Crawford.

Gilbert sonrió dolorosamente y respondió.

—¿Quiere decir... el menú más caro?

Damon miró al dueño de la cafetería con un poco de molestia y Gilbert sudaba bajo esa mirada.

—Tch. Tráelo. Veré cómo es.— Chasqueó la lengua por lo bajo.

En la opinión de Damon, todo en el menú era lo mismo. Después de eso, miró por encima del interior de la tienda. Como era de esperar, el interior era tan patético como el exterior.

Pensaba que Crawford y Sheldon tenían muy mal gusto de elegir una tienda como esta de entre todos los lugares. Había otros lugares con mejor clase para tener una reunión secreta, pero aún así venían aquí. De cualquier manera, vino a ver como era porque sospechaba, pero esto fue en verdad decepcionante.

La tienda no parecía tener nada especial al respecto. Era ordinariamente común y de aspecto insignificante.

<<... No hay errores aquí, ¿verdad?>>

Siguió recorriendo el lugar mirando cada detalle del local. Pronto se sintió incómodo y frunció el ceño. Aunque el saneamiento no era tan malo, el edificio en sí parecía demasiado descuidado en comparación con la mansión en la que vivía, por lo que se sintió inquieto.

Ahora que había venido él mismo, no tenía ningún sentido ¿Por qué Kalian Crawford seguiría viniendo a este lugar?

—Aquí está la bebida que ordenó.

En ese momento, una empleada de la cafetería se acercó a su mesa con una bandeja. Damian volvió la cabeza, pensando en preguntarle al dueño del café directamente sobre Kalian Crawford.

—Oi, llama al dueño de esta tienda ahora mism-......

Al levantar la mirada sus palabras quedaron en el aire. Una mujer con cabello oscuro y ojos rojos apareció ante su vista y los ojos de Damon se abrieron de par en par.

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<<Ese es Damon Salvatore, ¿no?>>

Una vez que bajó del carruaje frente a la tienda, Yuri reconoció su rostro.

<<¿Qué está haciendo en este barrio?>>

Estaba desconcertada pero pensó que él podría haber venido aquí para hacer otra cosa. Incluso sin esto, Snow, quien asumió que era Genos Sheldon, ha sido un cliente habitual de la tienda durante un tiempo y, últimamente, Kalian Crawford había venido con frecuencia. Así que la rareza de los personajes masculinos en la novela había disminuido.

Hablando de eso, Anne-Marie y Kalian Crawford.

Al principio, actuaron como si no estuvieran interesados el uno en el otro, pero hoy en día, se reunían por separado y parecían estar discutiendo algo en secreto.

<<¿Podrían estar resolviendo algo?>>

Pero Kalian Crawford no era... bueno. Anne-Marie era demasiado preciosa ¿Esta reunión estuvo bien?

Mientras Yuri fruncía el ceño en contemplación, Damon Salvatore entró en la cafetería.

—Hiik

Escuchó a Gilbert respirar.

Con el hecho de que estacionó descaradamente un carruaje frente a la cafetería, Damon parecía un noble desde todos los ángulos, por lo que Gilbert parecía algo incómodo mientras miraba la puerta de la tienda.

A diferencia de ella, su jefe no parecía haberse acostumbrado a tratar con los nobles a pesar de las frecuentes visitas de Kalian Crawford.

Damon miró alrededor de la tienda con el ceño fruncido y luego encontró un asiento vacío. Al ver eso, Gilbert rápidamente corrió hacia él.

—¿Q-Qué le gustaría ordenar, señor?

—Cualquier cosa, trae la opción menos patética.

Cuando escuchó la respuesta, Yuri casi se echó a reír.

Dejando a un lado el hecho de que estaba cruzando las piernas y actuando alto y poderoso, ¿no parecía uno de esos empresarios de segunda generación que arrojan dinero en algún melodrama?

Ahora que lo pienso, Damon Salvatore era tan cuchara de oro como Kalian Crawford.

—Srta. Yuri, la orden...

—El más caro, lo tengo.

Un rato después, Gilbert entró en la cocina secándose el sudor frío. Como Yuri podía escuchar su conversación a distancia, ya estaba preparando el menú para Salvatore.

Al igual que Kalian, Damon no era adecuado para este lugar, por lo que no tenía idea de a qué estaban jugando al entrar.

—Yo se lo llevaré.

—¿E-estará bien, Srta. Yuri? El cliente no parece tener una buena personalidad.

—Bueno, usted se pone nervioso con los nobles, Sr. Gilbert.

Basta con una rápida mirada para ver que el jefe estaba empapado en sudor como si hubiera escapado de la lluvia, y luego recogió la bandeja. Al final, ella le llevó la orden.

Además, aunque era cierto que Damon tenía una personalidad espinosa, no era del tipo que molestara a personas inocentes sin ninguna razón.

—Aquí está la bebida que ordenó.— Dejo el pedido sobre la mesa.

—Oi, llama al dueño de esta tienda ahora mism-......

Pero Damon, que estaba mirando alrededor de la tienda, de repente preguntó por Gilbert. Y en el momento en que se volvió para mirarla, sus ojos negros se dilataron.

*¡Sacudida!

Damon se puso de pie y su rodilla golpeó contra la mesa, haciendo que la mesa y el líquido en la taza de té se sacudieran.

—¿Está bien?

Yuri preguntó cortésmente, mirando a Damon que parecía muy sorprendido. Su respuesta nunca llegó.

—¿Debería llamar al Sr. Gilbert? Es el dueño de la cafetería.

—... No.

Damon murmuró una respuesta, mirando fijamente a Yuri. En serio parecía muy sorprendido por algo.

<<¿Qué es esto?>>

Algo molesta por una mirada tan pesada, Yuri frunció ligeramente el ceño. Solo entonces Damon pareció volver en sí, aflojó su expresión y volvió a sentarse.

Entonces Yuri se dió la vuelta y volvió por dónde vino.

—¿Que pasó?

—Quién sabe...

Gilbert se acercó apresuradamente a Yuri y le preguntó en un susurro, pero como era de esperar, Yuri no tenía una respuesta. Después de eso, el extraño comportamiento de Damon continuó.

Se sentó en silencio en su asiento y miró a Yuri mientras ella se movía por la cafetería. Su mirada era tan intensa que bien podría haber hecho un agujero a través de Yuri.